CUANDO
“Las Discusiones son constantes”
“Ya apenas se hacen planes conjuntos.”
“No tiene en cuenta mi opinión, no formo parte de sus proyectos”
“Parecemos dos extraños”
“No sé ya si lo que siento es amor”
“Apenas si tenemos relaciones sexuales”
Eyaculación precoz
“Alcanzo el orgasmo tan rápidamente que no da tiempo a que mi pareja lo consiga”
Vaginismo
“La penetración es imposible, me causa mucho dolor”
Falta de Deseo
“No me apetece tener relaciones sexuales, cuanto más me insiste, y yo me empeño es peor”
Impotencia
“Por muy excitante que sea la situación no consigo una erección”
Anorgasmia
Eyaculación retardada
SABEMOS CÓMO TE SIENTES
Estas desavenencias pueden generar ansiedad, tristeza, problemas somáticos, confusión en la toma de decisiones …
A veces no es fácil hablar de la sexualidad, pensamos que estos problemas no son frecuentes, que para el resto de las personas el sexo es siempre placentero, podemos sentir vergüenza, miedo, evitamos las relaciones sexuales por temor a lo que pueda ocurrir.
PODEMOS AYUDARTE
Basándonos en la investigación de los principios del Aprendizaje humano, analizaremos cuáles son las dificultades en la relación, qué desea cada miembro de la pareja, y abordaremos los conflictos en cada caso: entrenando en Habilidades de Comunicación y Resolución de Problemas; utilizaremos estrategias para disminuir la tensión, para que aumenten las interacciones agradables, para restablecer las relaciones sexuales placenteras, para en definitiva.
Volver a disfrutar de la compañía del otro.
Existen técnicas específicas para resolver las diferentes disfunciones sexuales: focalización sensorial, técnica de compresión, descondicionamiento de la contracción vaginal, desensibilización sistemática … Evaluaremos en un clima de confianza cuál es el problema, y diseñaremos la estrategia terapéutica más apropiada ya sea solo o en pareja. En la mayoría de los casos el abordaje es sencillo y el resultado de la terapia sexual muy satisfactorio, para conseguir