TRASTORNOS DE LA
“Qué dolor de tripa, cómo me he pasado, voy a engordar muchísimo, tengo que eliminar esto como sea”
“Si empiezo a comer no puedo parar”
“Estoy todo el tiempo pensando en la comida, todo gira en torno a ella, y al peso. Me cuesta tanto concentrarme en otras cosas”
COMPRENDEMOS TU PROBLEMA
La preocupación por el aspecto físico llega a convertirse en una obsesión, hasta tal punto que dirige la vida: hacer dietas, ejercicio, cremas para adelgazar… Se siente una gran ansiedad y angustia ante la posibilidad de ganar peso, a la imagen que podamos dar a los demás; a no cumplir los logros que suponemos los demás nos piden …
PODEMOS AYUDARTE
Es necesaria una evaluación exhaustiva de la persona tanto de su salud física como psicológica para plantear objetivos adecuados, y utilizar técnicas contrastadas para que puedas
Transtorno Alimentario.
En el origen de estos trastornos del comportamiento alimentario, la presión sociocultural es muy importante. Estar delgada/o, se ha convertido en el ideal de belleza, no solo para resultar atractivo sino que es equivalente de éxito en otras áreas de la vida.
Sin embargo Los TCA no tienen una única causa, sino que tiene un origen multicausal. Existen factores predisponentes tanto individuales, familiares, como sociales que nos hacen más vulnerables, algunos de los cuales pueden ser: tener hábitos de alimentación inadecuados; preocupación excesiva por la imagen corporal; ser muy perfeccionista; antecedentes familiares de obesidad; padres con mucha exigencia en los logros de sus hijos, muy protectores… Además hay factores que precipitan el trastorno como son los momentos de cambio importantes, y el inicio de una dieta. Y otros que los mantienen en el tiempo.
En la anorexia nerviosa hay una importante restricción de la comida, de manera que hay una gran pérdida de peso. En La bulimia nerviosa se producen “atracones” recurrentes. Consistiendo éstos en la ingesta rápida y excesiva de comida con sensación de pérdida de control. En ambos pueden aparecer conductas de compensación, como vómitos, uso de laxantes, periodos de ayuno… En el trastorno de atracones, éstos se producen de forma recurrente sin que aparezcan comportamientos compensatorios.
Normalmente las personas con estos problemas no suelen pedir ayuda de forma voluntaria sino que es la familia o los profesionales de la salud los que los detectan. El tratamiento de éstos suele ser largo y requiere de la participación de diversos profesionales de la salud. Además de la evaluación psicológica, es fundamental valorar si la salud física se encuentra comprometida, y en función del estado de la persona será necesaria la participación de otros profesionales (nutricionista, ginecólogo, psiquiatra, cardiólogo …).
Los objetivos de tratamiento en la mayoría de las ocasiones consistirán en: restaurar el peso; establecer hábitos adecuados de comida; suprimir los atracones; eliminar o restringir las conductas compensatorias; aprender estrategias de manejo de la ansiedad, y aumento de la autoestima; y mejorar la asertividad y expresión emocional. Así como conseguir un apoyo familiar eficaz.